Tegucigalpa – El periodista y autor hondureño, Óscar Estrada, consideró este lunes que el ex narcotraficante Juan Antonio “Tony” Hernández pudo haber utilizado la imagen del exdirector de la Policía Nacional, Juan Carlos “Tigre” Bonilla para generar terror.
“Él (Tigre Bonilla) alega que nunca formó parte de las estructuras del narcotráfico y, de alguna forma, yo le creo. Creo que lo que pasaba es que su marca era usada para generar terror, para poder decir ‘yo cuento con el ‘Tigre’ Bonilla a mi lado”, manifestó Estrada en entrevista con una radioemisora capitalina.
El autor del libro “Tierra de Narcos” aseguró que Bonilla, máximo jerarca de la Policía hondureña entre 2012 y 2013, construyó una “marca personal muy fuerte” y que ello “le jugó en contra”.
“Ahora yo lo interpreto a él como a alguien que construyó una marca personal muy fuerte y, en algún momento, esa marca le jugó en contra”, añadió Estrada en relación a Bonilla, quien, según la Fiscalía estadounidense, fue un policía despiadado que llegó a asesinar para favorecer a narcotraficantes.
Ejemplificó que el ex narcotraficante Juan Antonio Hernández, quien cumple una condena a cadena perpetua en una prisión federal de Estados Unidos, fue una de las personas que “seguramente utilizó esa marca para generar terror”.
“En ese mundo del narcotráfico, donde la gente no siempre enseña sus cartas a la primera, se está jugando a tener más de lo que se tiene, a ser más rico de lo que se es, a ser más poderoso de lo que se es. La marca del “Tigre” Bonilla, que seguramente usó “Tony” Hernández, le jugó a él en contra”, comentó.
Según la acusación de la Fiscalía del Distrito Sur de Nueva York, Juan Carlos “Tigre” Bonilla utilizó su cargo policial para facilitar el tráfico de cocaína hacia Estados Unidos.
Lo anterior a través de la portación de ametralladoras y dispositivos destructivos, con el objetivo de importar y promover el trasiego de cocaína.
Los fiscales estadounidenses también lo señalan de utilizar la violencia, incluido el asesinato, para proteger a narcotraficantes socios, entre los cuales se menciona al expresidente Juan Orlando Hernández -que enfrenta un proceso judicial simultáneo-, y a Juan Antonio “Tony” Hernández y a Geovanny Fuentes, ambos condenados a cadena perpetua por un juzgado federal de Estados Unidos.
Bonilla fue solicitado en extradición desde el 13 de marzo de 2021 y, un año después, el 9 de marzo de 2022, fue detenido en una estación de peaje al norte de Tegucigalpa, capital de Honduras.
El 10 de mayo de 2022, Honduras lo entregó a la justicia estadounidense, ante quien se declaró inocente de sus cargos durante la primera audiencia. Su juicio oral y público está previsto para iniciar el 18 de septiembre de 2022.
