Tegucigalpa – El director del Instituto Nacional de Estadísticas (INE), Eugenio Sosa, hizo una preocupante evaluación sobre la situación de pobreza en Honduras, destacando que el aumento de la misma es innegable y se relaciona directamente con la escasez de empleo en el país.
Según diversos estudios, para lograr una reducción efectiva de la pobreza, Honduras necesita mantener un nivel de crecimiento económico sostenido de al menos un 5 por ciento. No obstante, la realidad es menos alentadora, ya que el crecimiento económico se ha mantenido en torno al 3 por ciento, lo que dificulta la superación de este problema social.
Eugenio Sosa explicó que uno de los principales desafíos que enfrenta la economía hondureña es la escasa generación de empleo, lo que se traduce en un alto índice de desempleo.
Se estima que aproximadamente 280 mil hondureños se encuentran sin trabajo, lo que representa una grave situación de precariedad laboral en el país. Aunque ha habido una leve reducción en el número de desocupados, la problemática del desempleo sigue siendo latente y afecta a diversos aspectos sociales.
El desempleo es una preocupación que afecta a gran parte de la sociedad hondureña y se convierte en un factor determinante para otras cuestiones sociales. La falta de oportunidades laborales impide el crecimiento individual y familiar, y puede generar un círculo vicioso de pobreza y exclusión social.
El coordinador del Observatorio Económico de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH), Sergio Zepeda, ofreció datos aún más alarmantes al señalar que siete de cada diez hogares hondureños enfrentan dificultades asociadas a la pobreza.
La magnitud de este problema se hace evidente al constatar que más de seis millones de hondureños viven en condiciones de pobreza, lo que representa aproximadamente el 74 por ciento de la población nacional.
La pobreza en Honduras tiene múltiples causas complejas, entre ellas, la falta de empleo, la desigualdad de ingresos, la persistente violencia y los impactos del cambio climático en la economía y las comunidades vulnerables. Sin embargo, la falta de oportunidades laborales resalta como uno de los factores más influyentes para esta problemática social.
Ante este panorama, es urgente que el gobierno y las instituciones competentes en Honduras trabajen de manera conjunta para implementar políticas y programas que promuevan un mayor crecimiento económico y, sobre todo, que generen empleo digno y sostenible para los hondureños.
La superación de la pobreza requiere de una estrategia integral y comprometida con el bienestar de la población más vulnerable, buscando así construir un país más equitativo y próspero para todos sus habitantes.