Tegucigalpa – La Coordinadora de la Defensoría de Movilidad Humana del Comisionado Nacional de los Derechos Humanos (CONADEH), Elsy Reyes, expresó su preocupación por la posible agudización de la crisis migratoria en Honduras en 2024 si el Congreso Nacional no extiende la amnistía migratoria.
Esta amnistía, que benefició a más de 462,000 personas migrantes irregulares entre enero y noviembre de 2023, permitió rutas más seguras para proteger sus vidas. Reyes señaló que la ampliación es esencial para evitar violaciones a los derechos humanos y advirtió sobre las posibles complicaciones y consecuencias si no se toma esta medida.
Hasta la fecha, han transitado por Honduras alrededor de 120,006 mujeres, 248,549 hombres, 41,326 niñas y 52,223 niños. Se estima que unas 2,400 personas migrantes irregulares con edades entre 60 y 70 años, 251 de 71 a 80, 17 de 81 a 90 y dos mayores de 91 años han atravesado el país con destino a Estados Unidos.
La amnistía migratoria exonera de sanciones administrativas y permite el ingreso sin el cobro de los 236 dólares por entrada al país.
Reyes indicó que la situación actual es compleja y urgente, y los diputados tienen la responsabilidad de abordarla. Subrayó la importancia de que cumplan con las obligaciones internacionales y consideró la ampliación de la amnistía migratoria o la reforma de la Ley General de Migración y Extranjería como opciones viables.
Destacó que Honduras enfrenta una situación sin precedentes y llamó a la acción del Congreso Nacional para atender la crisis migratoria y proteger los derechos de los migrantes.
Más de 462,000 personas irregulares beneficiadas y desafíos pendientes
En mayo de 2022, el Congreso Nacional de Honduras aprobó una medida de amnistía migratoria, eximiendo a más de 462,000 personas migrantes irregulares de multas por infracción de la Ley de Migración.
Esta decisión inicialmente tenía una duración de tres meses, pero en agosto del mismo año, fue prorrogada. El 31 de mayo de 2023, se aprobó un nuevo decreto que extendió la amnistía hasta el 1 de enero de 2024.
Desde enero hasta el 8 de noviembre de 2023, un considerable número de personas migrantes de África, Asia, el Caribe, Centro y Suramérica se beneficiaron de esta amnistía.
Este grupo diverso, que supera las 462,000 personas, transitó por territorio hondureño, destacándose la identificación de un significativo porcentaje en condición de vulnerabilidad, incluyendo niños, niñas, mujeres y adultos mayores.
Los beneficiarios de la amnistía migratoria incluyen a 197,429 personas migrantes de Venezuela, 75,217 haitianos, 69,849 cubanos, 40,198 ecuatorianos y 10,322 colombianos. La mayoría de estas personas, aproximadamente el 90 por ciento, ingresaron a territorio hondureño por la zona oriental del país, particularmente a través de los municipios de Danlí y Trojes.
Este fenómeno ha planteado preocupaciones sobre la vulnerabilidad de los migrantes y destaca la importancia de decisiones políticas para abordar la situación migratoria en Honduras.