El candidato del Partido Republicano José Antonio Kast pasó a la segunda vuelta de las elecciones presidenciales de Chile luego de obtener el 27,9 por ciento de los votos en las elecciones del 21 de noviembre. Se postula contra Gabriel Boric, representante de la coalición de izquierda Approve Dignity. .
Anteriormente, este abogado de 55 años también intentó llegar a la Presidencia como candidato independiente en 2017. En esa ocasión, sin embargo, logró solo el 8 por ciento de los votos. Es un católico ferviente.
Uno de sus hermanos ocupó varios cargos ministeriales durante la dictadura de Augusto Pinochet (1973-1990), de los que Kast es un abierto admirador. En la introducción a su plataforma política, Kast se presenta a sí mismo como el líder potencial de una «nueva derecha», que se centra en tres pilares: la libertad, la defensa del orden público y la fuerza de la familia.
El candidato republicano propone la reorganización y modernización de la policía y se declara «cansado» de quienes utilizan la violencia como medio de acción política.
En materia internacional, Kast pretende evaluar la permanencia de Chile en el Consejo de Derechos Humanos de Naciones Unidas, «donde Cuba y Venezuela están presentes».
Kast promete estabilidad institucional y macroeconómica. Su prioridad serán las inversiones, la creación de empleo y la mejora salarial, con especial interés en «la recuperación de certezas legales y el desarrollo de un marco regulatorio atractivo» tanto para emprendedores como inversores.
El candidato presidencial también persigue la creación de un estado pequeño y eficiente, donde busca deshacerse de los «operadores políticos» y fusionar ciertos ministerios.