Tegucigalpa – La Red por la Defensa de la Democracia (RDD) ha emitido una alerta sobre las preocupantes deficiencias observadas durante las recientes elecciones primarias en Honduras, señalando que estos problemas amenazan la confianza en el sistema democrático y deben ser atendidos urgentemente antes de las elecciones generales programadas para noviembre.
Entre las exigencias más contundentes del informe destaca el llamado a la renuncia de la actual ministra de Defensa, Rixi Moncada, para evitar potenciales conflictos de intereses, argumentando que su influencia sobre las Fuerzas Armadas podría generar dudas sobre la transparencia del proceso electoral.
El monitoreo realizado por la RDD contó con 1.255 observadores electorales distribuidos estratégicamente en el 22% de los centros de votación registrados por el Consejo Nacional Electoral (CNE) y 1.268 Juntas Receptoras de Votos (JRV) con mayor carga electoral en 18 departamentos del país. Este esfuerzo ciudadano fue respaldado por una amplia coalición que incluyó organizaciones de la sociedad civil, sector privado, iglesias, academia, y grupos de jóvenes y mujeres.
La organización denunció obstáculos para realizar su labor, señalando que las credenciales para la observación electoral fueron emitidas de forma tardía, apenas 14 horas antes del desarrollo del proceso. Además, de las 1.122 credenciales solicitadas, solo recibieron 942, sin que se especificaran las razones por las que no se emitieron las 180 restantes.
A pesar de reconocer como positiva la introducción de herramientas tecnológicas como el Sistema de Transmisión de Resultados Electorales Preliminares (TREP) y la identificación biométrica, los observadores documentaron importantes fallas en su implementación, evidenciando deficiencias en la planificación, ejecución y supervisión del proceso.
Entre los problemas logísticos identificados destacan los retrasos en la entrega del material electoral y la instalación de las JRV, lo que afectó la apertura en un 40% de los centros de votación. También se reportaron fallas en el uso del lector biométrico para verificación de identidad y casos de posibles votos múltiples, irregularidades en la distribución de papeletas, deficiencias en la capacitación del personal electoral y dificultades en el llenado de actas.
En la etapa poselectoral, el informe señala retrasos significativos en el escrutinio y la transmisión de resultados. Aunque el TREP logró transmitir el 62% de las actas en tiempo real, el resto requirió procesamiento manual, lo que prolongó considerablemente la divulgación oficial de los resultados.
La RDD concluyó que, si bien el proceso se desarrolló mayoritariamente conforme a la normativa establecida, las irregularidades observadas afectan gravemente la confianza en el sistema electoral hondureño. Entre sus recomendaciones más urgentes destaca la necesidad de fortalecer la capacitación del personal, mejorar la logística electoral, garantizar la imparcialidad del proceso y adoptar medidas para una mayor transparencia.
Finalmente, la organización exhortó al CNE a realizar una investigación administrativa para identificar responsables y fallas en la distribución de maletas electorales; al Ministerio Público a iniciar una investigación penal sobre los incidentes reportados; y al Congreso Nacional y Secretaría de Finanzas a garantizar la aprobación y desembolso oportuno del presupuesto para las elecciones generales, evitando las prácticas de improvisación ante un ejercicio democrático de tanta importancia para el país.
Presentación del informe de Observación Electoral de la RDD – Elecciones Primarias 2025 https://t.co/xqA7l5X4OF
— RDD (@RDD_HN) March 13, 2025