Tegucigalpa – Este domingo, el país se sumió en la tristeza al recibir la noticia del fallecimiento del renombrado músico hondureño Manuel Castillo Girón, a la edad de 83 años. Castillo Girón, reconocido por su destacada contribución al folclore nacional, dejó un legado imborrable en la memoria colectiva de Honduras y en la música popular del país.
La partida de este prolífico artista ha conmocionado a la nación, recordando su valiosa aportación a la rica tradición musical hondureña. Nacido en 1940, en Jesús de Otoro, Intibucá, Castillo Girón se sumergió en el mundo de la música desde temprana edad, guiado y alentado por su madre, quien compartió con él su pasión por el canto y la interpretación.
A lo largo de su ilustre carrera, el maestro Castillo Girón creó una serie de canciones emblemáticas, entre las que destacan los inolvidables himnos de la hondureñidad, como «Jelipita» y «El indio Gualcinse».
Sin embargo, su legado más conocido y reverenciado es la emblemática composición «Adelante Selección», que fue adoptada como el Himno Oficial de la Selección Nacional de Fútbol de Honduras, infundiendo ánimo y orgullo en los corazones de los hondureños durante los momentos más memorables del deporte nacional.
Además de su impacto en la música, Castillo Girón fue honrado con el prestigioso Premio Nacional de Arte «Pablo Zelaya Sierra», en reconocimiento a su excepcional contribución a la elevación espiritual, moral y cultural del país a través de su arte y su compromiso con la preservación y difusión de la hondureñidad.
A lo largo de su vida, el músico talentoso enfrentó adversidades, incluido un accidente que lo dejó postrado en cama, afectando significativamente su salud. A pesar de ello, su espíritu creativo y su legado perdurarán en el corazón de la nación, recordándolo como un símbolo inmortal de la identidad cultural hondureña.
El legado musical y artístico de Manuel Castillo Girón seguirá iluminando los escenarios nacionales, recordándonos la importancia de preservar y celebrar nuestra rica herencia cultural.