Tegucigalpa – En su Homilía Dominical, el arzobispo de Tegucigalpa, José Vicente Nácher Tatay, resaltó la inseparabilidad de la verdad y la compasión en la figura de Jesús, afirmando que «todo es verdad, todo es compasión».
El mensaje transmitido subrayó la invitación del evangelio a vivir en la verdad y el amor, y advirtió que es el demonio quien utiliza la falacia de la aparente rigidez, ya que la verdad de Dios siempre va de la mano de su compasión.
El arzobispo también hizo hincapié en la importancia de la gratitud como una característica fundamental de Jesús.
En este sentido, recordó las palabras del evangelio que dicen: «Gratuitamente han recibido este poder», resaltando así el concepto de gratuidad como un valor específico de Jesucristo.
En contraste, lamentó que el mundo no comprenda el significado de la gratitud y señaló que ninguno de nosotros mereció vivir antes de existir.
En su llamado espiritual, el arzobispo exhortó a las personas a dejarse ver por Dios y a aprender a ver a los demás desde la perspectiva divina.
Destacó la importancia de ser vistos por Dios en su verdad iluminadora y en su elección que nos une a su misión.
