Tegucigalpa – Diario El Mundo comparte la inspiradora historia de José Alejandro Lagos Martínez, un joven hondureño que se ha destacado con luz propia al graduarse con honores de la Universidad Autónoma de Nuevo León en México, especializándose en la carrera de actuaría dentro de la Facultad de Física y Matemáticas.
Con tan solo 22 años, José Alejandro se ha convertido en un ejemplo a seguir para la juventud hondureña, demostrando que el esfuerzo y la dedicación son clave para alcanzar los objetivos profesionales y personales.
José Alejandro comparte un mensaje poderoso para los jóvenes: “La única cosa que puedo decir es que hagas lo que hagas, hazlo por amor. Ya sea continuar con tus estudios, comenzar a trabajar o incluso emprender un negocio. Recuerda el esfuerzo y la dedicación que te trajeron hasta aquí y trata de superarlo”. Su historia es un testimonio viviente de cómo la perseverancia y la pasión por lo que se hace pueden marcar la diferencia en la vida de cualquier persona.
Desde su infancia, Lagos Martínez destacó en las aulas, siendo incluso seleccionado por una universidad canadiense para recibir una beca completa, aunque las restricciones de edad en ese momento lo impidieron. Sin embargo, las puertas no se cerraron para él, y Monterrey le brindó la oportunidad de continuar su educación.
Por su parte el padre de José Lagos envía un mensaje alentador a los jóvenes hondureños recién graduados: “Animo a cada joven hondureño recién egresado de su colegio o universidad a continuar sus estudios en el extranjero, ya que les brinda una amplia gama de oportunidades para desarrollarse profesionalmente”. Este consejo destaca la importancia de buscar oportunidades más allá de las fronteras nacionales para expandir horizontes y perspectivas.
Los sacrificios académicos de José Alejandro dieron frutos antes de su graduación, cuando una empresa neoyorquina quedó asombrada por su potencial y decidió contratarlo para trabajar desde la nación azteca.
Su historia es un recordatorio de que el talento y la determinación pueden abrir puertas inimaginables, y se erige como un faro de esperanza para los jóvenes hondureños que buscan trascender fronteras y alcanzar sus sueños.
