El 70% de las prótesis fabricadas en Ucrania se distribuyen en el país.
Por Euronews
Cuando Alexis Cholas perdió su brazo derecho como médico voluntario en el frente de guerra del este de Ucrania, su carrera como cirujano acabó de inmediato.
Pero gracias a un nuevo brazo biónico, pudo seguir trabajando en el sector sanitario y ahora es un especialista en rehabilitación que ayuda a otros amputados.
Cholas explica en su consulta:»Es más fácil para mí trabajar con estos muchachos y creo que sienten el apoyo esencial de mi parte, tanto como médico como compañero de guerra, porque he recorrido el mismo camino que ellos».
El brazo biónico de Cholas fue fabricado por la startup ucraniana Esper Bionic.
Debido al fuerte aumento de la demanda de prótesis causado por las heridas en combate, ahora distribuye el 70% de sus productos en Ucrania.
Proporciona prótesis biónicas a precio de coste, unos 7.000 euros la pieza.
Lo suficiente para cubrir los costos de producción.
Bohdan Diorditsa, jefe de relaciones estratégicas de Esper Bionic asegura que_»Con su ayuda, puedes hacer cosas que nunca podrías hacer con un gancho, como manipular objetos pequeños o atarte los cordones de los zapatos o abrocharte la chaqueta. Además, creo que una prótesis biónica tiene que ver con la socialización»._
La devastadora invasión de Rusia en Ucrania ha creado una enorme necesidad de prótesis.
Se estima que 20.000 ucranianos han sufrido amputaciones desde que comenzó la guerra en febrero de 2022.
Los ucranianos pueden obtener prótesis normales de forma gratuita a través del sistema de salud pública.
Sin embargo, para conseguir una prótesis biónica normalmente necesitan financiación adicional de organizaciones benéficas o centros de rehabilitación como Unbroken, que dependen de donaciones privadas.