Tegucigalpa – Ilsa Vanessa Molina Aguirre, conocida popularmente como «La Palillona» fue recapturada la noche de este miércoles 19 de octubre por supuesto delito de lavado de activos vinculado al desfalco del Instituto Hondureño de Seguridad Social (IHSS).
El arresto responde a una orden del juzgado de ejecución con competencia territorial nacional en materia penal de Francisco Morazán, en virtud de una resolución emitida por la Corte de Apelaciones de lo Penal de fecha 29 de junio de 2022, donde resolvió revocar el beneficio de libertad condicional otorgado a la sentenciada hace dos años y medio, indicó el portavoz de la Agencia Técnica de Investigación Criminal (ATIC), Jorge Galindo.
Después de ser arrestada, Molina fue llevada a las instalaciones de la ATIC y hasta mañana (jueves) será remitida a la Penitenciaría Nacional Femenil de Adaptación Social (PNFAS), donde permanecerá privada de su libertad para cumplir una sentencia de más de 12 años.
De acuerdo con la información, la Corte de Apelaciones Penal admitió un recurso interpuesto por la Fiscalía en el que ordenaba la captura inmediata de «La Palillona», quien está implicada en el desfalco del IHSS.
En ese sentido, el tribunal revocó una resolución dictada por Juzgado de Ejecución de Francisco Morazán, que en el pasado otorgo su libertad, luego de que su defensa argumentó que debería ser favorecida con las reformas a la Ley de Lavado de Activos en el Nuevo Código Penal.
Ilsa Vanessa Molina, estuvo presa durante seis años y dos meses, pero el 20 de marzo del 2021 recobró su libertad. De igual manera, quedó libre su progenitora llamada Ilsa Damaris Aguirre de 54 años.
El apoderado legal de «La Palillona» dijo ese día que «después de haber cumplido la media pena y con la entrada del nuevo código penal, pues ha tenido ese beneficio de libertad condicional otorgado por los juzgados de ejecución».
Molina fue condenada a 12 años con tres meses de cárcel, luego de que se le encontrara culpable de comerte el delito de lavado de activos por casi 10 millones de lempiras por medio de la empresa Insumedic.
De acuerdo con la información, Molina se aprovechó, en ese entonces, de la relación que tenía con José Alberto Zelaya, quien era el gerente de compras, materiales y suministros del IHSS.