Danlí – Un grupo de 14 voluntarios del Programa de Voluntarios Jóvenes para la cooperación con el extranjero (JOCV) de la Agencia de Cooperación Internacional del Japón (JICA), participó en el Festival Internacional del Maíz (Festima) el cual se lleva a cabo cada año en la ciudad de, Danlí, El Paraíso, occidente de Honduras.
El objetivo de la participación de los voluntarios japoneses en la feria internacional se realizó con el propósito de promover la cultura japonesa, estilos de vida y celebrar dicho festival junto con los ciudadanos danlidenses para mantener una estrecha relación de amistad entre el pueblo hondureño y japonés.
En la actividad cultural se dieron cita algunos de los voluntarios japoneses de las diferentes especialidades que se encuentran trabajando en el territorio nacional.
Durante el desarrollo de la festividad los voluntarios de Jica realizaron una presentación sobre la experiencia de la cultura japonesa.
Asimismo, enseñaron a los asistentes el arte del “ORIGAMI”. Así como la caligrafía “SHODO”, degustación de un exquisito té verde y la prueba de ropa tradicional japonesa “KIMONO”.
Asimismo, durante la celebración de la Feria del Maíz, los voluntarios nipones realizaron una demostración de un baile japonés denominado “SORAN BUSHI”, en Japón los pesqueros cantan esta canción para animarse durante la pesca; por lo que, en esta ocasión los voluntarios japoneses escogieron este tema para alegrar el festival.
Cabe destacar que el propósito del Festival Internacional del Maíz es promover diferentes manifestaciones culturales en el marco de la cuadragésima tercera edición.
El Festival del Maíz impulsa al turismo oriental del país en honor a que la región ha sido de los mayores productores del grano de oro, el grano básico que es el maíz. Su tradición lo ha posicionado como una experiencia del turismo rural y gastronómico en Honduras.
El Programa de voluntarios de Jica es una modalidad de cooperación técnica en la que busca fortalecer las capacidades institucionales de las organizaciones receptoras, mediante el intercambio de conocimiento entre los profesionales japoneses y el recurso humano instalado, con el que conjuntamente se realizan actividades.
Jica en consonancia con las prioridades del país, contribuye con el envío de voluntarios japoneses para que apoyen diferentes áreas en el interior del territorio nacional. Estos voluntarios durante su misión en el país, viven con la población local y se familiarizan con las diferentes culturas y costumbres hondureñas.