Los ataques masivos rusos a centrales eléctricas y zonas residenciales dejan varios muertos desaparecidos en Zaporiyia, Jersón y en la región de Jmelnitsky.
Por Euronews
En Ucrania, los ataques masivos rusos a centrales eléctricas dejan al menos cinco muertos y varios desaparecidos, provocando además apagones generalizados.
A las afueras de la ciudad de Zaporiyia la explosión de misiles rusos contra zonas residenciales dejó varias víctimas. Mientras que otro bombardeo provocó un incencio en la central hidroeléctrica del Dniéper, que suministra luz a la central nuclear de Zaporiyia, la más grande de Europa.
Y en el oeste del país hubo varias ataques en la región de Jmelnitsky, entre Leópolis y Kiev, habrían dejado varios desaparecidos.
Rusia está ‘en estado de guerra’ contra Ucrania
El Ministerio de Defensa ruso confirmó que se llevó a cabo un ataque masivo en ‘venganza’ a las incursiones de drones ucranianos en territorio ruso en las últimas semanas.
De hecho, Rusia ha admitido por primera vez estar en guerra: Rusia está «en estado de guerra» contra Ucrania, admitió el portavoz del Kremlin en una entrevista publicada el viernes 22 de marzo, tras insistir en presentar el ataque contra su vecino, lanzado hace dos años, como una «operación especial» y rechazar el uso de la palabra “guerra”.
«Cuando comenzaron las explosiones, me desperté. Y después, hubo más explosiones. Entonces oí que los cristales saltaban por los aires. Así fue, pero aquí estamos. Y esto son fragmentos de cohetes», decía una entrevistada en Dnipró.
«La puerta de mi balcón se abrió, el techo el techo cayó y las ventanas del baño se abrieron las ventanillas», decía otra ucraniana siniestrada por los ataques rusos.
A primera hora del viernes, en Jersón también se produjeron varios bombardeos rusos contra un edificio residencial, que destruyeron varios apartamentos vacíos, sin provocar víctimas. El gobernador de Jersón publicó un vídeo de un edificio al que la artillería rusa, voló el tejado.
No quedó claro de inmediato si el ataque era parte de las múltiples agresiones rusas con misiles y drones en toda Ucrania, que apuntaron principalmente a infraestructura energética pero también atacaron áreas civiles.