Las cámaras de los teléfonos inteligentes tienen muchos sistemas ocultos que se encargan de automatizar el proceso de grabación. Es así que los sistemas de estabilización, procesadores adicionales, sensores, entre otros, pueden permitir a un ‘smartphone’ ver de noche, según el director de la empresa Intellektualni rezerv, Pável Miasoyédov.
«El único ámbito en el que las cámaras de los smartphones siguen luchando por competir con sus homólogas de mayor tamaño es el de la fotografía nocturna. La razón radica en su tamaño compacto. El sensor de la cámara es muy pequeño, y el haz de luz que entra a través de una pequeña lente recae en el sensor matriz, que consta de muchos píxeles sensibles», explicó el experto.
Según explicó Miasoyédov a la agencia Prime, cuanto más pequeño sea el sensor matriz, más pequeños serán los elementos que lo componen. Como resultado, el mismo haz de luz incide en varios píxeles a la vez, lo que provoca una distorsión de la imagen. Es difícil que los fabricantes puedan aumentar la sensibilidad del sensor indefinidamente, por lo que la calidad de las fotos y vídeos nocturnos disminuye.
Sin embargo, los sensores opcionales de profundidad del espacio, como el Tof o el LiDAR, pueden convertir un smartphone en un verdadero dispositivo de visión nocturna. Usualmente, se utilizan para determinar rápidamente las distancias a los objetos con el fin de acelerar el enfoque. En el proceso, crean en su mayoría imágenes incoloras basadas en vectores, pero separadas dentro del sistema.
«Si se instala y funciona un programa especial, que probablemente se llame visión nocturna, esa imagen aparecerá en la pantalla en tiempo real. Incluso en la más absoluta oscuridad podrás ver tu entorno», concluyó el experto.
