Tegucigalpa – En medio de una reciente intervención administrativa, el Instituto Hondureño de Seguridad Social (IHSS) enfrenta una crisis que ha dejado a cientos de derechohabientes sin acceso a medicamentos ni posibilidad de programar citas médicas en la periferia de La Granja, Tegucigalpa, situación que se ha prolongado por tres días consecutivos.
La paralización de servicios coincide con el nombramiento de una comisión interventora encabezada por la ministra de Salud, Carla Paredes, lo que ha generado interrogantes sobre la gestión y continuidad de los servicios básicos de la institución.
«Es una orden hasta nuevo aviso», informan en las ventanillas a los pacientes que intentan programar sus consultas médicas. Las autoridades del IHSS atribuyen la suspensión de citas a «problemas técnicos» en el sistema, aunque no han proporcionado un plazo específico para la resolución del inconveniente.
La situación es particularmente crítica en el área de farmacia, donde los derechohabientes, muchos de ellos con padecimientos crónicos, se han encontrado con la imposibilidad de reclamar sus medicamentos. «Venimos desde hace tres días y siempre es la misma respuesta: no hay medicamentos», expresó uno de los afectados.
Impacto en la población asegurada
La crisis está generando desesperación entre los derechohabientes, quienes dependen del IHSS para:
- Atención médica regular
- Medicamentos para tratamientos continuos
- Control de enfermedades crónicas
- Emergencias médicas
Esta situación plantea serias preguntas sobre la capacidad de la nueva comisión interventora para gestionar los servicios básicos de salud y garantizar la continuidad de la atención médica a los asegurados.
La coincidencia entre la intervención administrativa y la paralización de servicios ha generado preocupación sobre la planificación y coordinación en el proceso de transición, especialmente considerando el impacto directo en la salud de los derechohabientes que dependen del sistema.
