Tegucigalpa – En una entrevista reciente, Ana María Calderón Boy, exvocera de la Misión de Apoyo Contra la Corrupción y la Impunidad en Honduras (MACCIH), compartió sus opiniones sobre la instalación de la Comisión Internacional contra la Corrupción e Impunidad en Honduras (CICIH). Además, se refirió al papel desempeñado por la MACCIH en los casos de corrupción que investigaron.
Calderón expresó su escepticismo acerca de la posibilidad de que se instale la CICIH en Honduras, señalando que no ve un ambiente propicio en el país. Sus comentarios coinciden con la opinión de Luis Javier Santos, fiscal de la Unidad Fiscal Especial Contra la Impunidad de la Corrupción (Uferco), quien también considera que la CICIH no se establecerá.
«Hay una expresión de voluntad por parte de Naciones Unidas de brindar apoyo técnico a través de una misión anticorrupción, pero esto requiere un entorno adecuado, un ambiente óptimo para que pueda llevar a cabo sus funciones», afirmó Calderón.
La exvocera expresó su preocupación por la existencia de leyes en Honduras que limitan la acción del Ministerio Público. Mencionó en particular el decreto ley 119, que generó impunidad en la llamada «Red de Diputados». Calderón considera increíble que aún perduren decretos como este, que restringen el accionar de la justicia y perpetúan la impunidad.
Calderón también manifestó su descontento al observar que algunos de los casos en los que la MACCIH trabajó están archivados o congelados. Lamentó que la Uferco no haya tenido los recursos necesarios para llevar adelante las investigaciones y dar seguimiento a los procesos judiciales. Según su opinión, los casos de corrupción requieren un enfoque integral que involucre no solo la investigación, sino también el seguimiento y la prosecución de los juicios.
La exvocera fue invitada a Honduras por la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, con el propósito de reflexionar sobre el proceso de elección del fiscal general y adjunto. En su opinión, este proceso es esencial para fortalecer la lucha contra la corrupción e impunidad en el país.
Calderón lamentó la falta de recursos para la operatividad de la entonces Unidad Fiscal Especial Contra la Impunidad y la Corrupción (Ufecic). Esta situación ha afectado la capacidad de la unidad para llevar adelante sus labores de manera efectiva.
Las reflexiones de Calderón subrayan los desafíos que enfrenta Honduras en la lucha contra la corrupción y la impunidad. Ponen de relieve la importancia de contar con un entorno propicio y recursos adecuados para garantizar la efectividad de los mecanismos anticorrupción y el fortalecimiento de las instituciones encargadas de combatir estos flagelos. El llamado a promover la transparencia y la rendición de cuentas sigue siendo relevante en el contexto hondureño.