Tegucigalpa – El segundo vicepresidente del Congreso Nacional, Edgardo Casaña, confirmó que la reforma a la ley del Instituto Nacional de Previsión del Magisterio (Inprema) seguirá adelante, descartando la posibilidad de reducir la edad de jubilación del magisterio de 55 años.
Casaña, quien también es exdirigente magisterial, destacó que esta decisión se basa en estudios actuariales realizados por expertos, los cuales concluyen que bajar la edad de jubilación pondría en riesgo la sostenibilidad financiera del instituto.
Según el diputado, las demandas de algunos maestros que buscan una reducción adicional en la edad de jubilación provienen de sectores que no representan la mayoría dentro de las organizaciones gremiales docentes.
«Estas propuestas, si se aceptaran, llevarían al Inprema a la quiebra en un periodo de cinco a ocho años, debido a la insuficiencia de recursos para cubrir las pensiones y jubilaciones futuras», explicó Casaña.
La propuesta de reforma, según Casaña, busca asegurar que los recursos del Inprema sean suficientes para cumplir con los compromisos actuales y futuros sin comprometer la viabilidad financiera de la institución.
El vicepresidente hizo un llamado a la comunidad educativa para entender la importancia de estas medidas y trabajar conjuntamente en pro de soluciones sustentables que benefician a todos los docentes a largo plazo.
