El presidente de Francia, Emmanuel Macron, nombró este jueves a referentes de la derecha, como la ex ministra de Justicia Rachida Dati, como miembros de su nuevo gobierno encabezado por Gabriel Attal, el primer ministro más joven en la historia del país.
De todas formas, el mandatario francés mantuvo el núcleo duro de su gobierno.
Macron mantuvo el núcleo duro de su gobierno, que contará con un nuevo canciller: el eurodiputado y líder del partido presidencial Stéphane Sejourné, que sucederá a la diplomática Catherine Colonna, anunció el secretario general de la Presidencia, Alexis Kohler. Sejourné está en pareja con el recientemente nombrado primer ministro, Attal.
Dati, de 58 años y actual alcaldesa de un distrito de París, asumirá el ministerio de Cultura. Catherine Vautrin, de 63 años, cuya pasada oposición al matrimonio homosexual lastró sus posibilidades como primer ministra en 2022, ejercerá de ministra de Trabajo y Salud.
Con estos nombramientos, el mandatario centrista ficha a dos figuras que tuvieron cargos ministeriales durante la presidencia del conservador Nicolas Sarkozy (2007-2012). Dati era miembro además del partido de oposición de derecha Los Republicanos (LR), que la excluyó este mismo jueves de sus filas.
Los ministros de Economía, Bruno Le Maire; de Interior, Gérald Darmanin; y de Defensa, Sébastien Lecornu, que abandonaron en 2017 ese partido para unirse a las filas de Macron, seguirán en sus cargos, así como Éric Dupond-Moretti, al frente de Justicia.
La ministra de Deportes y Juegos Olímpicos, Amélie Oudéa-Castéra, asumirá también la cartera de Educación Nacional dejada por Attal, mientras que la nueva vocera gubernamental será Prisca Thevenot, de 38 años, un mediático rostro del oficialismo.
Varios ministros continúan en el nuevo gobierno paritario -Marc Fesneau (Agricultura), Christophe Béchu (Transición Ecológica) y Sylvie Retailleau (Educación Superior)-, aunque con sólo hombres en los ministerios considerados de Estado.
El nuevo gobierno de Attal, el primer ministro francés más joven y el primero abiertamente homosexual, tendrá como objetivo relanzar el segundo mandato de Macron en un año marcado por las elecciones europeas y los Juegos Olímpicos de París.
Macron les encargó impulsar el “rearme” industrial, económico, europeo y cívico, así como la “regeneración” del país, después de un inicio de mandato sin mayoría absoluta en el Parlamento y obligado a pactar con la derecha de LR sus reformas claves.
Los nombramientos parecían marcar un nuevo giro a la derecha del Gobierno centrista de Macron, y la deserción de Dati causó furor en el seno de Los Republicanos.
Eric Ciotti, líder de Los Republicanos, anunció que Dati sería excluida del partido tras su nombramiento, acusándola de “situarse fuera de nuestra familia política”.
La salida de Colonna era muy esperada, ya que los críticos consideraban que la ex embajadora en el Reino Unido no era una voz suficientemente fuerte para la política exterior francesa en un momento de múltiples desafíos globales.
Catherine Vautrin, ex ministra durante la presidencia derechista de Jacques Chirac y otra ex miembro de Los Republicanos, es la nueva ministra de Trabajo y Sanidad.
Cuando Macron llegó al poder en 2017, su Gobierno mezclaba figuras de derecha e izquierda, pero el nuevo gabinete está prominentemente salpicado de nombres de derechas.
El nombramiento de Attal y la remodelación se consideran cruciales para que Macron relance su Gobierno con la vista puesta en las elecciones europeas de junio de 2024, en las que la extrema derecha del protegido de Marine Le Pen, Jordan Bardella, de 28 años, lidera las encuestas.
Los ministros del gabinete también son muy conscientes de que Macron no puede volver a presentarse a las elecciones presidenciales de 2027, que representarán la mejor oportunidad de Le Pen para hacerse con el Elíseo.