Tegucigalpa – En la Penitenciaría Nacional Femenina de Adaptación Social (PNFAS), ubicada en Támara, Francisco Morazán, se desencadenó una revuelta el martes que resultó en la trágica muerte de al menos dos privadas de libertad.
Aunque aún no hay un informe oficial por parte de las autoridades, diversos medios de comunicación sugieren que el número de víctimas mortales podría ser mayor.
Los primeros reportes de prensa indicaron que tres reclusas resultaron heridas y varias fueron recapturadas después de un enfrentamiento armado. La escena fue caótica y peligrosa, lo que requirió la intervención de Medicina Forense y ambulancias de la Cruz Roja Hondureña para atender a las víctimas y levantar los cuerpos de las fallecidas.
Aunque no se ha confirmado el número exacto de reclusas fallecidas, la presencia de Medicina Forense deja en claro que lamentablemente hubo pérdidas de vidas femeninas en el incidente.
Alrededor de las 10 de la mañana, las primeras reclusas heridas fueron trasladadas al Hospital Escuela para recibir atención médica.
Ante esta situación, la viceministra de Seguridad, Julissa Villanueva, anunció de inmediato la intervención del centro penitenciario en Támara, sin proporcionar más detalles o confirmar el número de muertes.
Según los informes, la revuelta ocurrió dentro de la cárcel femenina, donde se registraron disparos por parte de las internas, generando una densa nube de humo debido a un aparente incendio provocado.
La viceministra Villanueva se pronunció en sus redes sociales declarando una situación de emergencia y dejando en claro que no se tolerarán actos vandálicos ni irregularidades dentro de la prisión para mujeres. Autorizó la intervención inmediata del lugar con la colaboración de bomberos, la Policía Nacional y personal militar.
De acuerdo con el Cuerpo de Bomberos, el incendio fue causado por la quema de colchones, pero ya ha sido controlado.
Sin embargo, es importante destacar que el gobierno de Honduras ha estado llevando a cabo una intervención en los 25 centros penales del país desde abril, sin lograr hasta ahora los resultados esperados.
La situación en las cárceles sigue siendo un desafío para las autoridades y se requieren medidas más efectivas para garantizar la seguridad y el orden en el sistema penitenciario.
