Tegucigalpa – Una iniciativa presentada directamente al Congreso Nacional por la diputada Angélica Smith para asignar un presupuesto especial de 276.9 millones de lempiras a las Fuerzas Armadas para las elecciones de 2025 ha desatado cuestionamientos de diversos sectores, incluyendo autoridades electorales actuales y anteriores.
El exconsejero del CNE, Kelvin Aguirre, calificó el presupuesto como «inflado», señalando que representa más del doble de los 122 millones utilizados en el proceso electoral anterior.
«En 2021, el presupuesto fue de 60 millones para primarias y 61 millones para generales, debidamente justificado», explicó Aguirre durante su participación en el foro Día Político.
La controversia se intensifica por la forma en que se presentó la propuesta. Cossette López, actual presidenta del CNE, reveló que el organismo electoral no fue consultado sobre esta asignación presupuestaria, a pesar de que históricamente el CNE ha sido el responsable de gestionar y transferir estos fondos a las Fuerzas Armadas.
Por su parte, la precandidata presidencial liberal, Maribel Espinoza, expresó preocupaciones sobre posibles conflictos de interés y exigió que el CNE lidere las negociaciones presupuestarias con la Junta de Comandantes, solicitando excluir a la actual candidata presidencial de estas discusiones por potenciales conflictos de interés.
«La Constitución no se viola y vamos a exigir, el pueblo unido, su cumplimiento. No más planes siniestros para quedarse en el poder», advirtió.
Según el proyecto de ley, los fondos serían destinados para garantizar el libre ejercicio del sufragio, la custodia y transporte del material electoral, y la vigilancia del proceso electoral 2025.
La propuesta será discutida en el Congreso Nacional en medio de llamados a priorizar otras necesidades nacionales en salud y educación.