Tegucigalpa. – Con mariachis y por todo lo alto, el diputado Jorge Cálix y los 17 congresistas electos del partido Libertad y Refundación (Libre), a quienes se les había calificado como “disidentes” llegaron al hemiciclo legislativo para incorporarse a la sesión del Congreso Nacional.
Minutos después que el jefe de bancada del Partido Nacional, Tomás Zambrano, exigiera legalidad a la junta directiva que preside Luis Redondo mediante una protesta con pancartas, el diputado Jorge Cálix ingresó al Congreso Nacional, para saludar a sus compañeros, causando el revuelo de los presentes.
Lo que siguió fueron abrazos entre los miembros del partido Libre y hasta bailes entre algunos de los congresistas.
“Venimos con la frente en alto, traigo 44 proyectos de ley para ser presentados y luego ser sometidos a discusión”, manifestó Cálix ante los medios de comunicación.
En las redes sociales se virilizó una fotografía del saludo entre Jorge Cálix y Rasel Tomé, quienes protagonizaron un altercado el pasado 22 de enero cuando se elegía la junta directiva del Congreso Nacional.