Tegucigalpa – El consejero del Consejo Nacional Electoral (CNE), Kelvin Aguirre, ha lanzado una advertencia sobre los riesgos que representa el Artículo 3 de la nueva Ley Electoral, que está siendo debatida actualmente en el Congreso Nacional de Honduras.
Este artículo, según Aguirre, podría vulnerar la autonomía del CNE, afectando negativamente la democracia en el país.
Aguirre subrayó que este proyecto legislativo interfiere directamente con la capacidad técnica del CNE para administrar las elecciones, algo que, de acuerdo con la Constitución y la Ley Electoral, debería ser competencia exclusiva del CNE.
Explicó que el dictamen del Congreso Nacional aborda aspectos técnicos que podrían comprometer la integridad del proceso electoral hondureño.
El CNE había enviado previamente su proyecto de presupuesto a la Secretaría de Finanzas, que incluye la implementación del sistema de Transmisión de Resultados Electorales Preliminares (TREP) y la incorporación de tecnología biométrica, herramientas vitales para la transparencia electoral.
A pesar de la importancia de estos sistemas para garantizar elecciones libres y transparentes, el Artículo 3 podría obligar al CNE a adoptar medidas específicas que no han sido acordadas de manera consensuada, poniendo en peligro la imparcialidad del organismo electoral.
La comunidad internacional, incluidos observadores y organismos dedicados a la promoción de la democracia, han expresado su preocupación por este desarrollo, indicando que podría tener repercusiones negativas en la confianza que los ciudadanos tienen en sus procesos electorales.
El debate sobre este artículo continúa en el Congreso, con varios legisladores oponiéndose a cualquier intento de limitar la autonomía del CNE, mientras otros apoyan la medida como un paso hacia la modernización y la mejora de los procesos electorales en el país.
La decisión final sobre este artículo será crucial para determinar la dirección futura de la democracia hondureña.