Tegucigalpa. – Luego de las acusaciones de soborno por parte del narcotraficante Víctor Hugo Díaz Morales, alias “El Rojo”, el presidente Juan Orlando Hernández, se limitó a ripostar que “qué se puede esperar de alguien que mata a sangres fría a una niña de tres.
De esa forma aludió Hernández el propio relató que hizo “El Rojo” en el juicio contra su hermando Tony Hernández en la corte del Distrito Sur de Estados Unidos donde en el tercer día aseveró que pagó 100 mil dólares para la campaña presidencial del exmandatario Porfirio Lobo y para la reelección de Juan Orlando Hernández como diputado al Congreso Nacional.
“El Rojo” compareció como testigo en la corte del Distrito Sur de Nueva York, donde aseguró haber entregado 100 mil dólares para financiar las campañas políticas del expresidente Porfirio Lobo y al entonces aspirante a diputado Juan Orlando Hernández, el mandatario hondureño cuestionó “qué se puede esperar de alguien que mató a una niña de tres años”.
Consultado sobre el testimonio de “El Rojo”, el mandatario Hernández reiteró que todo lo que se está viviendo en la Corte de Nueva York “es parte de lo que les dijimos de ese cuento de Alicia en el país de las maravillas”.
Pidió revisar “los perfiles de cada uno de los que está hablando, es impresionante de qué nivel de gente estamos hablando, alguien que a sangre fría asesina a una niña de tres años, ya les dije lo que les tenía que decir”, manifestó el gobernante antes de finalizar la comparecencia en la que habló del sistema carcelario hondureño.
Díaz Morales se encuentra en prisión, condenado a varios años, tras ser declarado culpable del tráfico de drogas y se encuentra colaborando como testigo de la Fiscalía para lograr obtener una reducción de penas.
En uno de los testimonios “El Rojo”, dejó atónitos a los presentes en la corte al confesar que ha matado a 18 personas al tiempo que reveló que asesinó a la hija de tres años de Héctor Fernández Rosa, alias “Don H”.
“El Rojo” confesó con toda frialdad haber asesinado a 18 personas y herido de gravedad a otras cuatro.
Al ser interrogado por Malone, abogado de “Tony” Hernández, “El Rojo” confesó haber asesinado a la hija de “Don H”, como parte de la guerra entre carteles que se había desatado en Honduras.
También confesó haber asesinado a su propia esposa disparándole en el rostro por lo que tuvo que huir a Colombia.
