Tegucigalpa – El panorama económico hondureño podría enfrentar importantes transformaciones ante el regreso de Donald Trump a la presidencia de Estados Unidos, según un análisis presentado por Fernando García Merino, presidente ejecutivo de la Asociación Nacional de Industriales (ANDI).
La política migratoria emerge como la principal preocupación, dada su potencial influencia en el flujo de remesas, que actualmente alcanza los 10,000 millones de dólares anuales.
«Debemos estar atentos», advirtió García Merino, señalando que las declaraciones de Trump sobre migración son «más agresivas» que en su mandato anterior, lo que genera inquietud sobre el futuro de los migrantes hondureños en Estados Unidos.
El análisis comparativo de las administraciones estadounidenses revela que, aunque Biden no modificó sustancialmente las políticas migratorias de Trump, las deportaciones aumentaron durante su gestión.
Esta tendencia sugiere la necesidad de que Honduras se prepare para posibles cambios en los patrones migratorios y sus consecuencias económicas.
Sin embargo, no todo son desafíos. García Merino identifica oportunidades significativas en el horizonte, particularmente en el contexto de las tensiones comerciales entre Estados Unidos y China. «Trump ya estuvo en la presidencia durante cuatro años y ha dado algunas líneas de lo que podría hacer ahora», señaló, anticipando una posible intensificación de las restricciones a las importaciones chinas.
Esta coyuntura podría beneficiar a Honduras a través del «nearshoring», una estrategia que busca relocalizar la producción cerca de la cadena de valor estadounidense. El país, que mantiene un Tratado de Libre Comercio (TLC) con Estados Unidos, podría capitalizar estas tensiones para impulsar sus exportaciones y atraer nuevas inversiones.
La ANDI subraya la importancia de mantener un monitoreo cercano de estos desarrollos, considerando tanto los riesgos potenciales para las remesas como las oportunidades emergentes en el comercio internacional, factores que podrían redefinir la relación económica entre Honduras y Estados Unidos en los próximos años.