Tegucigalpa – La presidenta hondureña, Xiomara Castro, ordenó en las últimas horas el uso del avión presidencial para repatriar los cuerpos de nueve hondureños fallecidos en México, informó este viernes la Cancillería.
Los cuerpos de los connacionales llegaron procedentes de México a la base aérea Hernán Acosta Mejía en Tegucigalpa, a petición de sus familiares, quienes solicitaron repatriar sus cadáveres. Los hondureños murieron en la ruta migratoria hacia Estados Unidos el año pasado.
Los fallecidos, todos del sexo masculino, llegaron en dos vuelos a la capital de la República; el primero con cinco cuerpos, aterrizó a las 11:00 de la mañana, hora local. El segundo con cuatro cadáveres, lo hizo a las 5:00 de la tarde.
Posteriormente, los restos mortales de los hondureños serán llevados a sus lugares de origen en Comayagua, Santa Bárbara, Ocotepeque, La Paz y Choluteca.
“La solidaridad” de la presidenta Xiomara Castro “se manifiesta nuevamente” al ordenar el uso del avión presidencial para trasladar los cuerpos de nueve hondureños fallecidos en México, destacó la Cancillería en un comunicado oficial.
Añade que esta iniciativa hace “que los bienes del Estado cumplan con la función social que les corresponden”.
“El gesto humanitario es el primero en su línea, pero ya se han girado instrucciones para que se sigan repatriando los más de 40 cuerpos de hondureños que están pendientes de ser retirados desde distintos lugares, incluyendo ciudades de Estados Unidos de América”, agrega el comunicado, descartando de momento que el avión sea vendido en un futuro cercano, tal y como se prometió en campaña.
La Secretaría de Relaciones Exteriores y Cooperación Internacional, no dio detalles sobre si el avión sufrió modificaciones, teniendo en cuenta que la nave está especialmente diseñada para transportar diplomáticos y no cadáveres. Además, el transporte de los ataúdes requiere ciertos parámetros de seguridad, sumadas a las precauciones por salubridad derivadas de la pandemia de coronavirus.
Según estimaciones de expertos, el transporte de un cadáver repatriado desde México a Honduras tiene un costo entre dos mil 500 y tres mil dólares, en ese sentido, se desconoce si el monto de transportar los nueve cadáveres fue absorbido por el presupuesto asignado a la Cancillería para cumplir con este tipo acciones en beneficio de los hondureños.
El valor del avión presidencial en 2015, fue calculado por las autoridades de Defensa de Honduras en 14 millones de dólares. La nave supuestamente fue donada por el gobierno de Taiwán.
Además de transportar diplomáticos, en otras ocasiones el Legacy 600 hondureño fue utilizado para el traslado de vacunas contra el Covid-19. De momento, Castro no ha utilizado la nave, pues todavía no ha salido del país, desde que asumió la presidenta.
