Tegucigalpa – En respuesta a los recientes rumores sobre un posible caso de viruela símica en Lempira, la ministra de Salud de Honduras, Carla Paredes, ha aclarado que, tras una evaluación clínica, el caso no cumple con los criterios de la enfermedad.
Sin embargo, las autoridades han tomado medidas preventivas estrictas, incluyendo el aislamiento de la familia del paciente y la realización de pruebas de laboratorio cuyos resultados se esperan para el próximo viernes.
Paredes subrayó que las lesiones observadas en el paciente no coinciden con las características típicas de la viruela símica, tanto en su apariencia como en su desarrollo.
A pesar de esto, se ha implementado un cerco epidemiológico alrededor de la familia y la comunidad como medida de precaución.
Honduras, que ya ha enfrentado un brote de viruela símica anteriormente, está preparada para manejar estos casos con eficacia. La ministra aseguró que el país dispone de los recursos y la infraestructura necesarios para diagnosticar y contener la enfermedad.
Las medidas preventivas también incluyen una campaña informativa para educar a la población sobre la transmisión y prevención de la viruela símica, así como una vigilancia intensificada en las fronteras, especialmente considerando que la mayoría de los casos recientes se han reportado en África.
En cuanto a las especulaciones sobre la salud del padre de familia, quien fue deportado recientemente y se rumoreaba que podría ser portador del virus, Paredes aclaró que este llegó sano y no muestra síntomas de la enfermedad.
La investigación continúa enfocándose en las lesiones que aparecieron en otros miembros de la familia hace 15 días, antes de su llegada.
