Tegucigalpa – José Antonio Morales, director de la empresa de telecomunicaciones Hondutel (Hondutel), explicó cómo se utilizará esta tecnología para acceder a la compra de chips de telefonía móvil para reducir los delitos de extorsión.
“El proceso es muy sencillo nosotros los hondureños hicimos un enrolamiento para el nuevo DNI en ese momento se tomó una fotografía para tener una nueva base de datos decadactilar de los dedos de las personas junto con facial, es un recurso de cual el estado o ha estado habiendo uso”, explicó.
En definitiva, solo necesitan implementar la verificación facial a través de una plataforma informática. “Tenemos varias opciones y alternativas para imprentarla el proyecto será con fondo del congreso y de los operativos, en una semana podríamos tener cuanto sería la inversión”, dijo.
“La base de datos puede estar en un servidor, pero será administrada específicamente por CONATEL”, dijo.
La Comisión de Seguridad Ciudadana y Prevención del Congreso Nacional es esta semana Registro Nacional de las Personas (RNP), Comisión Nacional de Comunicaciones (Conatel), Hondutel, Ministerio de Estado, Dirección Policial Anti Maras y Pandillas Contra el Crimen Organizado (DIPAMPCO) y Secretaría General de Seguridad, los operadores y suboperadores de servicios de telecomunicaciones que utilicen microchips y tarjetas SIM están obligados a registrar las ventas y suscripciones a los usuarios.
El presidente del Comité de Seguridad, Rafael Sarmiento, dijo: “Recibimos a las instituciones y operadores de justicia que han hecho observaciones importantes que va orientado a que los operadores y sub operadores de servicios de telecomunicaciones que utilizan chips estén obligados a registrar su venta y su activación”.
“Este instrumento va a servir para combatir de manera frontal el delito de extorsión y delitos conexos y tener mayores controles por parte de Conatel”, dijo.
La venta de chips para celulares y la extorsión son dos problemas interrelacionados en Honduras. Una tarjeta SIM de teléfono móvil es una tarjeta SIM utilizada para activar una línea telefónica en un dispositivo móvil para que el usuario pueda realizar llamadas, enviar mensajes de texto y acceder a Internet.
La venta de tarjetas SIM para teléfonos celulares es un negocio popular en Honduras porque muchas personas necesitan una línea telefónica para mantenerse en contacto con amigos y familiares. Pero las bandas criminales también utilizan estas empresas para extorsionar a las personas.
Los extorsionadores compran chips móviles al por mayor y los venden a precios más altos a las personas que necesitan líneas telefónicas. Después de que una persona compra el chip, el chantajista llama a su número de teléfono y amenaza con hacerse daño a sí mismo o a su familia si no paga una cierta cantidad.
Muchos hondureños han tenido que pagar extorsionadores para protegerse a sí mismos y a sus seres queridos. El gobierno hondureño ha intentado abordar el problema introduciendo medidas de seguridad más estrictas y creando unidades policiales especiales para investigar y enjuiciar a los infractores.
Pero la extorsión sigue siendo un problema grave en Honduras, y muchas personas siguen siendo víctimas de ella.
